Cuestión de supervivencia

Huir del cambio es una tendencia natural. La rutina ayuda a economizar acciones y pensamientos. Sin embargo, saber gestionar el cambio en las organizaciones es clave para su supervivencia.

“Con lo que nos ha costado llegar hasta aquí”, “lo sabemos hacer tal y como está, “que necesidad hay de cambiar”. Estas frases nos podemos decir y oír cuando se va a iniciar cualquier cambio.

El antiguo paradigma en gestión de personas habla en términos de estandarización de puestos, procesos, cliente final, empleado, recursos humanos (RRHH), funciones y tareas.

En una organización, las descripciones de puestos pueden tener años y años de vida, con suerte se revisan anualmente.

El nuevo paradigma profesional y organizacional habla de diversidad de proyectos, sinergias de procesos, cliente interno, personas, equipo y competencias.

Si queremos sorprender a nuestros clientes, si queremos diferenciarnos, ¿No deberíamos innovar en nuestros procesos internos para obtener diferentes resultados?

Si Henry Ford y su predecesor, Olds, no se hubieran cuestionado sus métodos, no hubiera nacido la producción seriada, decisiva en la popularización de su producto.

¿Qué podría pasar si nos cuestionáramos periódicamente? ¿Y si llevamos nuestro proceso de diseño a la gestión de personas?

La innovación es una competencia que trasciende al departamento de diseño. La gestión del cambio ya no es cuestión de mejora, es cuestión de supervivencia.

Gracias por leerme.

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